11.9.20

Cinco poemas de estío (II).

 


II  

Furtivo atardecer

que envuelves en la sombra

el valle de las lágrimas

y dejas encendidas

las crestas de las peñas,

ahogada luz

que devuelve al recuerdo

reposo en la memoria.

La noche se apodera

de todo ensoñamiento

y va borrando el tiempo

hasta surgir la aurora.

Cubierto y gris el cielo

tu nostalgia me aflige

cuando esa solidaria

niebla opaca de sierras

por sus lomas advierte

certeza de tu pérdida.

 

FURTIVO ATARDECER.

18/08/2020.

 

 

 

8.9.20

Cinco poemas de estío (I).


 

I  

Vida  desalejada…

La ladera se abate

mostrando la alquería,

sucesión de cubiertas

que cercenan los pinos.

La distancia conserva

libertad y sosiego

y el rumor cristalino

del silencio del agua

que custodia esa calma

y aviva la memoria.

Se percibe la brisa,

temblorosas las hojas,

que subraya los pasos

del ausente perdido,

solitario recuerdo

con su nombre en el árbol.

Dolorido en el cuerpo

y vacío en el alma,

envejecido y solo,

un transcurrir despacio

del tiempo que perdura

como en un sueño eterno.

 

UNA LEJANÍA CERCANA.

16/08/2020.