11.11.21

Penitencia.


Todo parece afín e invariante,
la eternidad de árboles vacíos,
las mañanas de plata, los rocíos
del invierno presente y humectante.

Los vientos cuando avienten primaveras
sajarán de tus huellas tu memoria,
silencio mineral de la victoria
que asola los solares de tus eras.

Solitaria tristeza del desierto
que tu espacio mantiene más cautivo,
el impasible tiempo fue motivo
de no crecer más flores en tu huerto,

como esas malas yerbas sigo vivo
como esos prados yertos sigues muerto.


[09/03/2017]


10.11.21

El sacrificio de Isaac.

 
Caravaggio, Sacrificio di Isacco. [1603]. Galería Uffizi, Florencia.

(La Biblia no dice la verdad. En el Monte Moriah no había cobertura. El drama se convirtió en tragedia y el patriarca Abraham no pudo evitar el sacrificio de su hijo Isaac).


Padre, ¿por qué me sacrificas cuando me encuentro solo?

He subido contigo al monte del castigo arrastrando mi culpa
esperando que el ángel que me guarda detenga la mano que ajusticia
padecida tortura que el pecado quebranta sin expiación ni pena.

Presumo que adivinas que el daño inmarcesible me iría socavando
hasta dejar mi alma pendiente de los hilos que fabrica el destino
del niño que no he sido cuando la vida hechiza y el miedo a causar daño
enmudece palabras de petición de auxilio cuando todo discurre
por sendas separadas que tornan a anudarse en momentos de angustia.

Tu obediencia debida purifica el perdón que preciso para afligir el ansia
de abrigada inocencia que colmate mi corazón desnudo en cuerpo lacerado.

Me acompañas doliente durante tres jornadas con puñal y con fuego,
amándome me cedes, con planto contenido, la carga que preludia
la ausencia del cordero que conjure la ofrenda desolada en ara de holocausto.

Mas sé que no has podido evitar que los hados comparezcan en busca de su presa:
no existe providencia que me ampare por siempre de la nada más bruna.


EL SACRIFIO DE ISAAC.

[09/06/2016].
in memoriam L.


9.11.21

Kadish por un hijo perdido.


Kadish por un hijo perdido.

No quisieras oír la voz del mar cuando te llame
y no puedas seccionar el nudo marinero que te atrape
y te meza a merced de sus pleamares.

No quisieras oír la voz del mar cuando te cambie
tu destino y deje para siempre -y es inútil resistir a sus embates-
sellado el pacto de sangre que marcará tu vida.

No quisieras oír la voz del mar cuando te borre
tus nombres primigenios y te convierta, cluster con dato fragmentado,
en unidad de gasto, en estadística.

No quisieras oír la voz del mar cuando te oculte
que tu existencia es duelo, afligida tristeza de no tener sosiego,
y dolor y tormento, y angustia y agonía.

No quisieras oír la voz del mar cuando te duerma
con nocturna salmodia que perturbe vigilias, mientras acarrees,
en labores de pesca, tus redes de deriva.

No quisieras oír la voz del mar cuando te lleve
cual sudario azulado y no divises más la stella vespertina
que, el último crepúsculo, sugestione tu noche.

No. No quisieras oír la voz del mar…
 
Tan sólo las sirenas con seductores cantos explican el sentido de este temido  salmo,
 
cuando el mar,  en verdad, sólo sea la muerte.

Y vendrá del mar la paz y el perdón y el consuelo para nosotros.

[14/8/2014]


8.11.21

Muerte.




La muerte es un milano que sobrevuela inmóvil
vigilando paciente ocasiones propicias,
silente como el viento, planeando isotermas,
recorre las alturas inanimadamente
alertado tan sólo si percibe la vida
para lanzar su ataque casi siempre certero.

La muerte es un milano que sobrevuela inmóvil…
Espero su llegada con las manos vacías,
el corazón añicos y la mente quebrada
por tantos abandonos, y mi locura crece
por perder lentamente el poco amor logrado.

La muerte es un milano que sobrevuela inmóvil
y se lleva lejana mi inútil esperanza.


[09/05/2015].